MANUEL MÉNDEZ – Hoy estaremos comentando un tema relacionado con el trabajo de la Comisión de Género y Equidad del PIT-CNT, porque se aprobó un protocolo de violencia doméstica y acoso sexual. Con Milagro Pau estuvimos viendo este tema en su momento. ¿Cómo surge la idea de este protocolo y cuándo fue aprobado?

ALBA FERNÁNDEZ – El Primero de Mayo sorprendió mucho que el movimiento sindical en su plataforma levantara el tema de la violencia doméstica. En aquel momento eran 19 las muertas por violencia doméstica en menos de cuatro meses. Ahora son veinte. Muchas de ellas fueron trabajadoras y también fueron trabajadores quienes las ultimaron. Por lo tanto, pensamos que el movimiento sindical tenía que tomar posición con un tema tan importante. Como todas las sociedades, no estamos exentos de este problema, y teníamos que hacer algo como movimiento social organizado.

Ya habíamos trabajado en un protocolo de denuncias años atrás, que está medio parado ahora, pero lo vamos a seguir. Por supuesto, tenemos que hacer algo con nuestros pares, como tomar el tema, ponerlo sobre la mesa y no seguir barriendo debajo de la alfombra. Ahí está el PIT-CNT y todos sus federaciones, sus sindicatos, para tomar posición y actuar primero ante sus pares.

MM – ¿Cuáles son las bases, el fundamento de ese protocolo?

AF – Toma la violencia de género, la violencia doméstica, el acoso sexual, laboral y docente, a partir de un trabajo muy importante a cargo de las compañeras del Departamento de Igualdad de Oportunidades. La ley fue propuesta porque se acordó en la tripartita. Luego fue al Parlamento, y por unanimidad de todos los sectores, se votó. Porque el acoso sexual hace al ámbito laboral y a la salud laboral de los compañeros y compañeras.

El Secretariado aprobó el protocolo, que pasó a la Mesa Directiva, y abre un gran desafío para los departamentos de género y las comisiones de mujeres existentes en los sindicatos. Yo confío mucho en la Comisión de Mujeres de Aebu, porque tienen mucha experiencia y están trabajando en el tema.

Planteamos que ante un caso de acoso sexual, laboral o violencia doméstica, se tome el tema desde el punto de vista de la formación y la sensibilización dentro de los sindicatos. Luego, de acuerdo a la posibilidad estatutaria de cada sindicato, proponemos que se nombre una comisión investigadora, donde es fundamental que participen las mujeres de la comisión de mujeres, alguien de la directiva, y algún delegado o delegada de salud laboral.

Nosotros podemos detectar el tema pero tenemos que derivarlo, porque no es parte de nuestra formación atender estos casos. Se va a trabajar con independencia en el caso de que sea necesaria una investigación, y luego se informarán los resultados obtenidos de manera confidencial a la dirección del sindicato. Y se tomará la resolución de acuerdo a los aspectos estatutarios de cada sindicato. Incluso, planteamos la posibilidad de que se pudiera perder la condición de afiliado o afiliada en caso de que estén implicados en un caso de violencia doméstica o acoso sexual o laboral.

MM – ¿Hay muchas denuncias de este tipo dentro del movimiento sindical?

AF – Lamentablemente, sí. Hemos tenido casos de denuncias de acoso sexual, y creo que antes hay que informar dentro de los sindicatos, que tienen que hacer carne en esta situación. Es un tema muy viejo que ahora se empezó a dar a luz; no quiere decir que antes no existiera. Tenemos los elementos, una ley, pero hay que formarnos y actuar ante estas situaciones. Tener veinte mujeres muertas en un país de tres millones de habitantes es una infamia. Pero no podemos hacer como el avestruz y poner la cabeza bajo la tierra y decir que no pasa nada. Está pasando, y también entre nuestros propios afiliados. Es un desafío muy importante, no solo para el departamento sino para los sindicatos. Se habla de violencia en el fútbol y en las calles, pero no se toma el tema de la violencia doméstica y el acoso sexual de la misma forma.

Tenemos que demostrar que como movimiento sindical organizado le damos importancia, y es un paso más para decirle a la sociedad que es un tema que tienen que tomar hombres y mujeres, porque si no va a seguir pasando. Faltan políticas públicas al respecto. Tenemos centros para atenderlo, pero inclusive en la plataforma del Primero de Mayo planteamos la importancia de que en el plan de vivienda hubiera una cuotificación para mujeres que han sufrido violencia doméstica. Y también es necesario pensar en políticas de empleo para poder romper ese círculo y no ser un número más en esta escalada.

MM – Alba, acabás de regresar de Ginebra junto con la delegación del PIT-CNT. ¿Finalmente habrá convenio y recomendación para las trabajadoras domésticas?
 
AF – Sí. Es uno de los primeros temas que se empezó a discutir. Se discutió si iba a ser una recomendación o un convenio, con una discusión muy larga y ardua, porque el empresariado no estaba de acuerdo en algunos sectores y algunos países. En general no se vota en la OIT, pero se votó un convenio con recomendaciones.

MM – ¿Cuáles serían las principales recomendaciones?

AF – En principio, es ver cómo se toma el tema de la trabajadora y el trabajador doméstico, con derecho a la negociación colectiva y a la seguridad social. Y también se habló del trabajador y trabajadora domésticos migrantes. Muchas enmiendas quedaron para ser discutidas el año que viene. Lo importante es que habrá un convenio con recomendaciones, y esa era la posición uruguaya, como así también estaba de acuerdo el movimiento sindical.

Ahora la OIT está trabajando un tema que en Latinoamérica afecta a 11 millones de trabajadores y trabajadoras. La discusión se tenía que dar, porque se le da calidad de trabajo al trabajo doméstico, cosa que antes no se reconocía. Esperemos que en este año de discusión y el año que viene, se pueda terminar el convenio con recomendación y lo puedan reconocer los distintos países. Nosotros tenemos una ley que fue acordada en forma tripartita y la negociación colectiva. Somos el único país del mundo con negociación colectiva para los trabajadores domésticos.

MM – ¿Cómo está este sector a nivel mundial en cuanto a salario, negociación colectiva y condiciones laborales?

AF – Existen todas las situaciones posibles. En cuanto a los trabajadores migrantes, en Uruguay es un fenómeno que se da poco. A nivel internacional hay menores que van a países totalmente extraños. Se habla de un contrato de trabajo y ahora los trabajadores domésticos lo van a impulsar en la negociación colectiva. Hay un gran trasiego de trabajadores que van a las casas a través de agencias de colocación, y se corre mucho peligro.

Esperamos que el año que viene se culmine con este convenio que realmente es importante. Porque tiene que ser ratificado por los países, pero además, porque una recomendación es solo lo que dice la palabra: una recomendación. Creo que, aunque sea lentamente, estamos en el camino correcto.
 

Transcripción: Valentina Roldós