Con el fin de informar el estado de situación de la discusión en torno a la Caja de Jubilaciones y Pensiones Bancarias (CJPB) y la búsqueda de soluciones para su estabilización, debemos establecer los siguientes aspectos:
1. El déficit financiero de Caja Bancaria se encontraba dentro de las proyecciones realizadas por el instituto en su reforma de 2008, que permitía cubrirlo con las reservas existentes, hasta que en 2020 se instala la pandemia. La decisión de eliminar las vacantes de la banca pública, la pandemia generando miles de seguros de paros entre las empresas financieras y el impulso tecnológico que generó sobre los clientes del sistema financiero, provocaron la pérdida de 2000 puestos de trabajo. Esta situación, sumada a una menor permanencia de los trabajadores en actividad, el deterioro de las reservas por el atraso cambiario y otros factores financiero, generaron la situación actual, en que los recursos disponibles son insuficientes para culminar el año 2023 cumpliendo sus obligaciones.
2. No resultan de recibo la supuesta sorpresa del Ministerio de Trabajo sobre el estado del instituto, ni los argumentos manejados. Si no estaba informado por el presidente de la Caja —designado por ese ministerio— debió atender los reiterados reclamos de AEBU sobre la necesidad de aplicar la totalidad de la PCP. El factor determinante que aceleró la crisis de Caja Bancaria fue la caída del 10% de sus aportantes, y eso también fue denunciado por AEBU en todos los ámbitos. Esta realidad pudo ser atendida a partir del incremento de la Prestación Complementaria Patronal (PCP) al 0,04%, definido en la ley 18.396, lo que fue rechazado por el Gobierno y la patronal bancaria. La eliminación del descuento de 0,015% de la PCP —que benefició a los bancos desde 2008— depende exclusivamente de un decreto del Poder Ejecutivo, y se aplicación a partir del año 2022 hubiera sido para atender las necesidades de Caja Bancaria.
3. Este contexto ha provocado el consumo de las reservas y obligado a la representación de los trabajadores y jubilados en el Consejo Honorario de la CJPB a proponer medidas paliativas, para contar con todos los recursos disponibles en el corto plazo que permitan cumplir con el pago de las jubilaciones y pensiones. Entre ellas se incluyó el adelanto de los aportes patronales y personales antes de la fecha de pago de jubilaciones, para disponer de un colchón financiero que permita culminar el año. La medida fue aceptada por los bancos oficiales, Bandes Uruguay y Banco Nación, más algunas empresas financieras y de seguros. Sin embargo, la Asociación de Bancos Privados institucionalmente decidió no contribuir. De esta forma conspira contra la estabilidad de la Caja y afecta el proceso de búsqueda de soluciones.
4. La extrema situación de la CJPB con un déficit proyectado por un total de U$S 670 millones en los próximos 10 años, sumada a la negativa del Gobierno a aplicar la ley 18.396, ha obligado al sindicato a asumir con responsabilidad la búsqueda de soluciones. AEBU lo ha hecho bajo las reglas de juego impuestas por el Gobierno y la ley de reforma de la seguridad social aprobada, que establece un plazo de 90 días para presentar un proyecto de ley que adelante los cambios del régimen general a las cajas paraestatales. Este plazo se suma a la imposibilidad constitucional de legislar en materia de seguridad social después del 25 de octubre del presente año.
5. La participación de AEBU en dicha comisión está dirigida a encontrar una propuesta de solución para Caja Bancaria, que pueda ser analizada por el gremio en su Asamblea General. Para ello se establecieron los siguientes postulados:
• La supervivencia de la Caja Bancaria y su autonomía, frente a los intentos de diversos sectores de promover su intervención o liquidación.
• Todas las partes integrantes de Caja Bancaria deberán contribuir a la solución en forma equitativa.
• Las contribuciones de trabajadores y jubilados deberán encuadrarse en un proceso de transición y evitando afectaciones excesivas.
• La contribución del Estado se podrá concretar a partir de fuentes de financiación, que la Caja Bancaria pagará superada la etapa crítica. Se impedirá así cargar a la sociedad con el costo de la solución.
• Mantener la vigencia de la ley 18.396, tanto en materia de parámetros de convergencia con el nuevo régimen general como en la utilización de la PCP como parte de la solución.
6. Sobre esta base, hemos reivindicado el aumento de la PCP como parte de la solución, rechazado el aumento de la edad a 65 años anticipadamente y reclamado que los cambios tengan una transición que no altere en forma inmediata las condiciones de edad y cálculo de jubilaciones. Hemos exigido a la vez que no se afecte el poder adquisitivo de los jubilados, entre otros aspectos.
7. La disputa para generar un proyecto que la dirección del sindicato pueda poner a consideración del gremio se centra en el equilibrio de las contribuciones de cada parte. Que se alcance una solución, con una apropiada transición para los trabajadores y un bajo efecto sobre los jubilados, depende concretamente de que patronales y el Gobierno hagan la contribución necesaria. Es allí donde la banca privada en primer lugar, desarrolla tanto una ofensiva pública como de presión política para aportar lo menos posible a la solución.
8. Participamos de una negociación fuertemente condicionada. En el terreno de los plazos, por el agotamiento de los recursos de la Caja y por las limitaciones legales impuestas por la reforma aprobada y aspectos constitucionales. En materia política, por el riesgo de intervención de la Caja, con la posible afectación de derechos adquiridos o la alternativa de que se apruebe un proyecto sin participación del sindicato, que resulte más regresivo y perjudicial para trabajadores y jubilados. En el terreno ideológico, la reforma reciente de la seguridad social descargó todo el costo del ajuste sobre los trabajadores sin que las empresas contribuyeran a la solución de sus problemas. En el terreno de la opinión pública, donde las paupérrimas condiciones jubilatorias de la inmensa mayoría de los uruguayos transforman en privilegios los derechos alcanzados por otros trabajadores con sus luchas y contribuciones.
9. En este contexto, el Consejo Central continuará participando del proceso de negociación, en un marco de movilización que apunta a destrabar la contribución de Gobierno y patronales, para encontrar una base de solución equilibrada para la Caja Bancaria. Por ello, las acciones obedecerán a enfrentar decididamente a cada uno de los obstáculos que se presenten. En este momento las acciones y decisiones de los bancos privados son la mayor resistencia a la búsqueda de soluciones, tanto en sus exigencias de sacar mayores beneficios para sus intereses como en su ofensiva contra los trabajadores, en una campaña plagada de mentiras y medias verdades, mientras continúan ampliando sus ganancias que en los últimos 12 meses alcanzaron el récord de U$S 400 millones.
10. Convocamos a todos los trabajadores y jubilados a continuar participando de las movilizaciones definidas, mantenerse informados y organizados en torno al sindicato, hasta alcanzar una propuesta de solución para el déficit de nuestra Caja Bancaria, que pueda ser considerada por nuestra próxima Asamblea General.
Consejo Central de AEBU
Filial PIT-CNT
