A finales de octubre se realizaron muy concurridas reuniones con activos y jubilados en Salto, Paysandú y Trinidad, y en la pasada semana los encuentros fueron el lunes 9 en Colonia; el martes 10 en Carmelo; el miércoles 11 en Fray Bentos, y el jueves 12 en Mercedes.

De esta intensa actividad —que además abarcó reuniones con medios de prensa y autoridades locales— destacamos la entrevista mantenida por el consejero central Juan Fernández con el  periodista Martín Rostan, de Canal 12 de Fray Bentos.

Nuestro dirigente inicialmente se refirió a la serie de asambleas de circunscripción llevadas a cabo y posteriormente se detuvo en el tema central de la próxima AND, que precisamente se discute banco a banco y seccional a seccional: la proyectada reforma previsional y nuestra Caja Bancaria.

«Nosotros consideramos a la seguridad social como un derecho humano», afirmó Fernández y por ello se manifestó en desacuerdo con la metodología que se ha dado el Gobierno para concretar la reforma mediante la designación de una comisión de 15 técnicos, «cuando la seguridad social atraviesa a toda nuestra sociedad». A su entender, «la temática, tratada por 15 expertos y en un período muy acotado de tiempo,  nos coloca a los trabajadores del sistema financiero en alerta». 

Fernández contrapuso la urgencia con que se maneja esta reforma con la dedicación que AEBU le ha prestado al tema durante décadas, materializada en numerosos estudios técnicos y en la ley de reforma de Caja Bancaria puesta en ejecución en enero de 2009. «Desde la apertura democrática, hasta ahora, trabajar sobre la seguridad social es parte de las tareas cotidianas de AEBU», graficó.

Más tarde el foco de la entrevista recayó sobre un elemento pionero «en Uruguay y en el mundo» que la reforma de Caja Bancaria incorporó a nuestra seguridad social: un complemento financiero empresarial ligado a la actividad de las empresas. Al respecto afirmó que «si la única alternativa para la financiación de la seguridad social radica en el número de personas y en la cantidad de salarios y sobre estos se aplica un gravamen, claramente el avance tecnológico no solo  cuestionará los puestos de trabajo sino que también jaqueará a la seguridad social. Porque menos puestos de trabajo implican menos capacidad de recaudación para sostener a la seguridad social». 

Para el consejero central desde hace muchos años AEBU puso el foco en la obtención de fuentes alternativas de financiación que compensaran la constante disminución de personal de las empresas y permitieran el equilibrio de la seguridad social, sin desmedro de sus prestaciones, dentro de la concepción de estas como derechos humanos a atender. «Una fuente de financiación que, midiendo mensualmente el volumen de los activos de todas las empresas que laboran en el sistema financiero, se les aplica una tasa a ese volumen de activos y con eso se genera una fuente de recursos adicional, la Prestación Complementaria Patronal (PCP). Esa fuente de financiación es inédita en Uruguay y en el mundo y su aplicación significa que de cada 100 pesos que entran a la Caja, 22 provienen de ese ingreso».

Fernández agregó que esta innovación deber ser tenida en cuenta a la hora de llevar adelante una reforma previsional general, como ya se lo hace en Caja Bancaria. Para comprobar la importancia de este recurso agregó que Caja Bancaria, desde su reforma de 2008, viene cumpliendo año a año con las previsiones económicas efectuadas sobre la evolución de su patrimonio y de sus desembolsos, motivo por el cual la presentó como un ejemplo a seguir.