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9 de julio: Otra fecha para no olvidar

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9 de julio: Otra fecha para no olvidar

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Una consigna susurrada a la oreja recorrió Montevideo el 9 de julio de 1973: «A las cinco en punto en 18 de Julio».

Para poner contexto a lo sucedido en esa jornada que ya ha entrado en nuestra historia, debemos recordar que el 27 de junio del mismo año se había producido el golpe de Estado militar y que el país estaba en huelga desde entonces, con sus fábricas ocupadas. Fue en esas circunstancias que se organizó, difundió y llevó adelante una marcha contra la dictadura, desde la Plaza Independencia hasta la Plaza Cagancha.
 
Un gesto de resistencia desde un lugar de trabajo —en este caso la Radio Sarandí—permitió pasar la convocatoria mediante la lectura del poema de Federico García Lorca Llanto por Ignacio Sánchez Mejías. El periodista, escritor y director de teatro Rubén Castillo leyó varias veces durante su programa unos versos que decían: «Las heridas quemaban como soles a las cinco de la tarde, y el gentío rompía las ventanas a las cinco de la tarde. A las cinco de la tarde. ¡Ay, qué terribles cinco de la tarde! ¡Eran las cinco en todos los relojes! ¡Eran las cinco en sombra de la tarde!».
 
Pese a las duras circunstancias bajo las que trabajaba, el inolvidable Rubén logró filtrar su mensaje de manera reiterada, anunciando la medida organizada por el PIT-CNT, varios partidos políticos y organizaciones sociales.
 
Aun soportando una fuerte represión policial y militar la enorme multitud logró manifestarse, evadir las embestidas de la represión y volver a agruparse, para aparecer nuevamente en 18 de Julio con determinación renovada.
 
Decenas de militantes resultaron apaleados y detenidos y junto con ellos lo fueron, entre los más notorios por su actividad política, los generales Líber Seregni y Víctor Licandro, el coronel Carlos Zufriategui y el senador del Partido Nacional, Walter Santoro.
 
Esa misma tarde fue arrancada la puerta del local del diario El Popular mediante un tanque de guerra y este órgano quedó ocupado por las fuerzas dictatoriales hasta el fin de la dictadura.
 
Fue este uno de los muchos capítulos históricos más masivos de la movilización popular durante la dictadura y seguramente el más ferozmente reprimido. Esta es otra de las fechas que los uruguayos no debemos olvidar.