De esta forma queda regulada la relación laboral hasta el 30 de junio de 2020. El convenio presenta la innovación de atender temas extra salariales, además de los ajustes remunerativos.  Entre ellos se destaca el compromiso de los bancos de informar al sindicato con anticipación sobre los cambios tecnológicos que afecten el empleo. Asimismo —y para adaptar los trabajadores a las nuevas herramientas— se prevé que las instituciones presenten al sindicato planes de capacitación. Elbio Monegal, presidente del Consejo del Sector Financiero Privado, calificó a estas cláusulas como «las más importantes del acuerdo». 

Otro aspecto vinculado con el empleo y con los avances tecnológicos fue parte de este acuerdo, al que se llegó tras un mes de negociaciones: la situación de los cajeros, un cargo que va perdiendo pie frente a la expansión de las buzoneras que organizan, cuentan y acreditan automáticamente el dinero. Sobre este punto Monegal dijo a Portal AEBU: «Para el caso en que las instituciones resuelvan eliminar estos cargos los trabajadores afectados mantendrán el quebranto de caja». En cambio, si el apartamiento de la función es solicitado por el trabajador, este no continuará percibiendo la partida. 

El convenio acordado incluye la decisión de conformar entre los bancos y el sindicato cajas de auxilio para atender beneficios de salud y mejorar las prestaciones actuales de este tipo.  También en el terreno de la salud, se incluyó una cláusula destinada a formar comisiones de salud laboral en todos los bancos donde hasta el momento no hayan sido constituidas.

En cuanto a licencias especiales, se incorporaron al convenio tres días de licencia anuales para cuidados por internación —hospitalaria o domiciliaria— de familiares (padre, madre, cónyuge, hijos y hermanos) y otros tres días para trabajadores víctimas de violencia doméstica. 

Por inflación y con ajustes

En materia de aumentos salariales, Monegal explicó que durante la vigencia del convenio anterior los aumentos nominales recibidos fueron superiores a la inflación. Por este motivo se aplicó en este nuevo convenio un correctivo en menos de 3,89 %. «En el convenio anterior el correctivo por inflación funcionaba tanto ‘en más como en menos’, pero en el que ahora firmamos los correctivos serán solamente ‘en más’, esto es, solo si la inflación supera los aumentos nominales, a los 18 meses de vigencia del convenio (el 30 de junio de 2019) y a su final (el 30 de junio de 2020).»

Los nuevos salarios acordados prevén ajustes equivalentes a la inflación esperada por los analistas privados para toda la vigencia del convenio. Asimismo, en el ajuste retroactivo al 1 de enero de 2018 incluyó el correctivo ‘en menos’ antes aludido, pendiente del convenio anterior.

Los siguientes ajustes salariales serán del  3,80 % al 1 de julio de 2018; 3,68 % al 1 de enero de 2019, e iguales cifras al 1 de julio de ese año y al 1 de enero de 2020.                         

Avance en acuerdos de rama

A modo de resumen, Monegal consideró que este convenio «es un paso más en la defensa de la negociación colectiva en tiempos de recortes y ataque a los sindicatos en toda la región». Y este acuerdo se logra «en medio de cambios tecnológicos disruptivos», circunstancias que no han impedido al sindicato «reafirmar la defensa del empleo y el salario, a la vez de avanzar en las condiciones de trabajo y en el alcance de acuerdos de rama».